martes, 8 de abril de 2008

MADRE






Es alma del hombre,
inconciente paso del sonido develado,
suma inmortal de percepciones,
vida en palpito de otro manifiesto continente…

¡Aquí el cimiente Ánimus chispeante!

Envuelta en divino trance,
mitigada la inocencia,
al dejo inconsistente de amargura
en credos mutilantes.

¡Aquí el Anima de siglos imperante!

En cromada dualidad
la que días insospechados nacer diera
en infancia de las historias
a niño sin fronteras.

Esta misiva la vida diera:

De sublimes enredan pliegues nuestras almas…

Madre mía,
cantan mis versos postergados, tus caricias
las añoro, las extraño y de contento
las alabo…

Corren río abajo unos cristales
que anegan lomajes que cuidaste,
convulsiona, enajena y emociona amada mía,
todo el instante al evocarte…

Allegadas corrientes siderales nadan,
sueñan en su viaje vestirse mis ropajes
y tu el escudo, tu el baluarte,
tu el entendimiento al amor inclaudicable

Mi sentimiento de la vida atesorado,
de la tierra, Yanni, maestro de música dotado,
y en líneas heredadas de tu sino
hijo Maht en letras a partitura allegado.

Madre,
giros ascendentes tus colores,
despliegan mundo mágico en albores,
en brazos al espacio
portales abiertos al contacto de tus dones.

Que luces, que brillos, los ritmos
me asaltan, me tienen,
eres cielo madre tierra
mi dote…

Maht-08-04-2008-15:20hrs.
Soy creador en tinieblas encantadas

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